Un saque sin efecto, golpeando la pelota de forma directa, sin frotarla. Es el más sencillo técnicamente.
Efecto: ninguno o muy poco (bola "muerta").
Ventajas: útil para variar y engañar al rival si espera efecto.
Ideal para: principiantes o para sorprender con un cambio de ritmo.
A alto nivel, puede ser muy útil con una bola rápida y larga, ubicada justo donde no se la espera el defensor.
El mejor ejemplo: Jan-Ove Waldner: