Bernadette Szőcs, nacida en 1995 en Rumanía, es una de las figuras más carismáticas del tenis de mesa europeo.
Campeona de los Juegos Europeos en la modalidad individual y representante olímpica en varias ediciones, ha sido un referente en su país y una rival habitual en las fases finales de grandes competiciones.
Su estilo es técnico y creativo, con un juego muy variado y recursos que desconciertan a sus oponentes. Es también muy conocida por su carácter competitivo y su energía en la mesa, algo que la ha convertido en una de las jugadoras más populares en Europa.